En una ciudad cordobesa instalaron cuchas públicas para los perros callejeros

07.08.2015 10:20

 La iniciativa fue concretada por un grupo de jóvenes militantes y contó con el apoyo de la Sociedad Protectora de Animales y el municipio local. Los refugios, hechos con tambores de aceite acondicionados con almohadones, se instaron en el predio del ferrocarril. El proyecto de las cuchas se emparenta con un proyecto que también promueve la adopción de los perros que se encuentran en la calle.

La novedosa experiencia para asistir a los perros de la calle lleva el lema: “No mata el frío, mata la indiferencia”. Foto DevotoDigital/InfoGEI
La novedosa experiencia para asistir a los perros de la calle lleva el lema: “No mata el frío, mata la indiferencia”. Foto DevotoDigital/

Los perros callejeros de la ciudad cordobesa de Devoto ahora cuentan con cómodas “cuchas” públicas para refugiarse de las inclemencias del tiempo. Este iniciativa surgió de un grupo de jóvenes que militan en “Juntos por Devoto”.

A través de un trabajo comunitario, los militantes se unieron a la Sociedad Protectora de Animales y al municipio para instalar en el predio del ferrocarril, el lugar en donde más comúnmente se observa a los canes vagabundos, confortables “cuchas” construidas con tambores de aceite. Cabe destacar que los recipientes fueron cortados y acondicionados convenientemente con almohadones para que los perros no padezcan el frío del invierno.

La experiencia fue bautizada “No mata el frío, mata la indiferencia” y se basa en el trabajo mancomunado de diferentes organizaciones civiles. En diálogo con el diario La Mañana de Córdoba, Ezequiel Bartellone explicó que “nuestra idea no es que haya perros en la calle sino que promovemos la adopción”, es así que a quien decida hacerse cargo de un can, también se le regalará su “cucha” correspondiente.

“A través de Facebook, empezamos a pedir donaciones de tachos, de telas, de goma espuma para hacer los almohadones. La gente se sumó mucho. Fue un proyecto que pegó mucho en la sociedad”, indicó el coordinador del grupo.

Para ubicar las “cuchas”, fue necesario contar con el permiso del uso del espacio público por parte de la Municipalidad que vio con interés esta propuesta y la tomo como una prueba piloto para determinar si puede extenderse su aplicación.

“Colocamos tres cuchitas en el predio del ferrocarril de Devoto que es por lo general donde están esos perros que andan dando vueltas. Esto lo coordinamos con la Protectora de Animales para saber si era viable o no. Nos dijeron que si, nos dieron el apoyo, dijeron que era una idea super innovadora”, manifestó Bartellone. Además de estas tres cuchas, hay otras 5 ya listas que se distribuirán en casas de familias que las han solicitado porque en su barrio hay habitualmente perros callejeros que son asistidos por los vecinos.

Si bien la responsabilidad por el estado sanitario de los animales corresponde al municipio y a la Protectora, los jóvenes voluntarios suman su grano de arena dando protección a los perros que circulan sin hogar.