Encontraron en Carlos Tejedor unos extraños seres momificados, ahora serán analizados en La Pampa.

25.01.2016 13:41

Según los primeros indicios, las manos con cinco dedos, la forma de las orejas, los ojos o las patas difieren de un felino. Además, por la fisionomía de las extrañas criaturas, podría tratarse de animales que caminaban erguidos. Ahora, analizan enviar a los seres a una Universidad pampeana para estudiarlos.

Se trata de dos cuerpos que se encuentran en estado de momificación

Trabajadores de la construcción hallaron en una vivienda en refacción de la localidad bonaerense de Carlos Tejedor los cuerpos de una extraña pareja de criaturas, las cuales se encuentran en estado de momificación. Los restos podrían ser trasladados a General Pico en los próximos días, a fin de que sean analizados en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Pampa.

El portal Distrito Interior de la localidad de General Villegas días atrás publicó lo que les contó Luis Rodríguez, una de las personas que hallaron a las pequeñas momias.

De acuerdo al testimonio del trabajador de la construcción, el hallazgo se produjo mientras cambiaban unos tirantes de madera en la parte trasera de una vivienda donde vive una mujer mayor en Carlos Tejedor. Uno de sus compañeros se encontraba desmantelando el cielorraso de un alero cuando encontró los restos, se sorprendió y llamó a gritos a sus colegas.

Cuando todos los empleados se acercaron al lugar observaron con sus propios ojos la presencia de los dos cuerpos, de unos 30 centímetros de largo, en aparente estado de momificación. Si bien algunos rasgos los hicieron pensar en que estaban ante dos gatos muertos, algunas características físicas particulares refutaron rápidamente esa teoría.

Las manos con cinco dedos, la forma de las orejas, los ojos o las patas difieren de un felino. Además, los mismos albañiles consideraron que por la fisionomía podría tratarse de animales que caminaban erguidos, es decir en dos patas.

“Es algo muy extraño”, sostuvo Rodríguez, quien reconoció que “en un primer momento pensamos que podían ser esqueletos de gatos, pero hemos encontrado y podemos asegurar que no tienen nada que ver con esos animales”.

“El lugar nunca había sido tocado, tampoco se advierten a simple vista agujeros o espacios como para que hayan entrado o alguien los haya colocado. Como sea, desde la apariencia, hasta la manera en que están es muy extraño”, repitió el trabajador, quien expuso su intención de enviar los cuerpos a General Pico para que alguien los analice y pueda determinar de qué se trata