Los Pumas buscan afianzar el grupo
Portugal.- Del frío y las nubes del centro de Inglaterra al sol y el calor del sur de Portugal hay sólo dos horas y media de vuelo. Ayer los Pumas cambiaron súbitamente de entorno cuando se trasladaron hasta esta localidad, donde hoy comenzarán la penúltima etapa de la preparación con miras al Mundial.
El amistoso con tintes de entrenamiento que fue el partido con Leicester Tigers del sábado pasado significó la última posibilidad de ensayar movimientos en situaciones reales de juego. Ahora es momento de terminar de afinar detalles, corregir errores y terminar de asimilar el plan de juego para el debut ante Nueva Zelanda, el 20 de este mes, en Wembley.
"Lo principal es terminar de consolidar el grupo que ya está unido", explicó Martín Mackey , director nacional de rugby de la UAR. "Necesitábamos una semana en la que los jugadores pudiesen estar distendidos, todos juntos la mayor cantidad del tiempo sin tener que trasladarnos. Es un lugar que está preparado para recibir delegaciones deportivas, fundamentalmente de rugby".
El Brown's Sports & Leisure Club está pegado a esta ciudad fundada en el siglo XI, cuya arquitectura deja entrever la influencia de la invasión árabe y cuyas playas adyacentes hacen del turismo su principal fuente de ingresos, junto con la pesca. Pero los Pumas pasarán la mayor parte del tiempo en su búnker, un complejo de alto rendimiento que fue utilizado, por ejemplo, por el seleccionado inglés antes de la Copa de Francia 2007.
La elección de este lugar no fue azarosa y mucho tuvo que ver que el entrenador Daniel Hourcade haya trabajado muchos años acá, e incluso formó parte del staff de Portugal en aquel Mundial. "Es un lugar ideal, lo conozco bien", había dicho Hourcade antes de partir de Argentina. "Tiene todo lo que se necesita. Tengo muchos amigos en clubes para que nos ayuden con entrenamientos con oposición. Seguro lo vamos a hacer. Es bueno antes de ir a un Mundial estar tranquilo como grupo", agregó.
La modalidad de entrenamiento de los Pumas será similar a la que viene realizando todo el año, con la excepción de que serán prácticas menos prolongadas. "Ahora somos más detallistas y tratamos de ajustar con más fineza cosas del juego", explica Mackey. "El volumen de los entrenamientos es menor, pero buscamos tener 100% de eficiencia".
La decisión de la UAR de pasar por aquí antes de aterrizar por fin en Londres (el próximo domingo) para la preparación final antes del debut generó algunos cuestionamientos. ¿Por qué dejar Inglaterra y no seguir metidos en clima del Mundial? ¿Por qué pasar del frío al calor, para luego volver al frío? ¿Por qué sumar un viaje en avión, con el desgaste que implica?
Mackey aclara todas las dudas: "Necesitábamos un lugar donde pudiésemos tener todo en un mismo lugar: hotel, gimnasio y cancha de entrenamiento. Por sobre todas las cosas, que nos asegurara un buen clima, que no lloviera y pudiésemos estar plenamente concentrados. No son temperaturas tan extremas: ni en Inglaterra hizo tanto frío ni acá tanto calor [hay unos 10°C de amplitud térmica, entre 15 y 25 de promedio]. El vuelo directo de Leicester es nada más que de dos horas y media. Por otro lado, la adrenalina que vamos a empezar a sentir la semana que viene va a ser mayor y estos días queríamos estar alejados del entorno del Mundial. Finalmente, para la UAR implicaba un costó mucho menor que si nos quedábamos en Inglaterra, ya que recibimos una invitación. Las condiciones son excelentes", concluyó.